La música y el desarrollo personal
Todos somos conscientes de cómo la música nos ha ido acompañando en diferentes momentos de nuestra vida. De cómo cientos de canciones han servido de fondo en nuestras alegrías, amores, desamores, angustias y tristezas. De cómo seleccionamos el apartado de » canciones alegres» o » canciones tristes» en nuestro reproductor dependiendo del estado de ánimo con que amanezca nuestro día (o de si queremos cambiarlo). Y es que la música, no sólo suscita en las personas una experiencia estética, sino que permite expresar sentimientos, circunstancias, pensamientos o ideas. Es otra forma de comunicarse allá donde no llegan las palabras.
Los efectos de la música
“La música actúa sobre la bioquímica de nuestro organismo, positiva o negativamente según el tipo de música…Sterheimer ha descubierto ciertas notas musicales que afectan a los aminoácidos de una proteína y en consecuencia las plantas crecen con mayor rapidez …
(Poch, 1999)
En las últimas décadas, la comunidad científica ha mostrado un gran interés por investigar los efectos beneficiosos que la música ejerce sobre el ser humano. Se ha comprobado que la música influye no sólo en el estado actual al momento de escucharla, sino también en el desarrollo de las personas a largo plazo. Es capaz de producir cambios fisiológicos en el organismo, como acelerar o retardar las principales funciones orgánicas (ritmo cerebral, circulación, respiración, digestión y metabolismo), incrementar o disminuir el tono y la energía muscular, modificar el sistema inmunitario o alterar la actividad neuronal en las zonas del cerebro implicadas en la emoción. El oír música, ayuda a bajar los niveles de ansiedad, disminuir el dolor, hacer más rápida la recuperación de los enfermos, además de convertimos en personas más optimistas.
Psicológicamente, la música puede despertar, evocar, estimular y desarrollar diversas emociones y sentimientos. También puede traer a la memoria olores y colores, y modificar el estado de ánimo del oyente y su percepción del espacio y del tiempo.
Es una fuente de placer que en ocasiones es capaz de provocar en nosotros una verdadera experiencia catártica, puesto que la expresión de las pasiones de forma sana y saludable nos libera y limpia, permitiendo un contacto más directo con nuestra esencia, y, como consecuencia, originando auténticos momentos de felicidad.
Intelectualmente, la música desarrolla la capacidad de atención y favorece la imaginación y la capacidad creadora, estimula la habilidad de concentración y la memoria a corto y largo plazo y desarrolla el sentido del orden y del análisis. Facilita el aprendizaje al mantener en actividad las neuronas cerebrales, y ejercita la inteligencia, ya que favorece el uso de varios razonamientos a la vez al percibir diferenciadamente sus elementos (frecuencia, longitud de onda, timbre, melodía, armonía y ritmo), y sintetizarlos en la captación de un mensaje integrado, lógico y bello.
Quienes escuchan música desde pequeños y de forma constante, tienen mejores habilidades de lenguaje, son mas creativos y felices.
Terapéuticamente hablando, la música se utiliza para restaurar, pontenciar o mantener el funcionamiento físico, emocional, cognitivo, o social de las personas. Se denomina musicoterapia a este uso de la música con fines terapéuticos. Actualmente se aplica en áreas muy diversas: psicosis, autismo, enfermedades psicosomáticas, geriatría, discapacidad motora y sensorial, adicciones, embarazo,enfermedades terminales, hipertensión arterial, estados de ansiedad, depresión y estrés, alteraciones del sueño, etc.
Os invitamos a escuchar las siguientes melodías, que son una pequeña muestra para empezar a entrar en contacto con nuestro mundo interior a través de este arte magistral. No hay una forma correcta de sentir ante ellas, así que esperamos vuestras respuestas con lo que os ha suscitado esta selección .
» Así habló Zarathustra» de Richard Strauss
– Spotify: Also sprach zarathustra, op 30: sunrise ( versión de Fritz Reiner)
» Prelude» de Yanni
* Os damos los enlaces para el Youtube , aunque para una mejor calidad para la obra clásica os recomendamos buscar en Spotify siguiendo nuestras indicaciones para buscar la mejor grabación. También os recomendamos que os pongáis unos auriculares y cerréis los ojos para aumentar el efecto emocional que produce.
Psicóloga
La música es emoción en vena, es descripción de nuestro mundo interior, y por eso es la manifestación artística a través de la cual pueden los seres humanos sentirse en comunión más íntima y plenamente. O todo lo contrario.
Escuchar música es descubrir al ser humano que la compuso y al que la interpreta, con la rotundidad de todo lo efímero. Porque la música, por más que nos empeñemos en encerrarla en frascos digitales y portátiles, se inventa y se deshace al mismo tiempo, tiene la contundencia de la vida y de la muerte.
Gracias Raquel, te estaré siguiendo.
Saludos musicales,
Juanmi Morales
La música es intrínseca al ser humano y se considera precursora del lenguaje hablado. Evoca y contagia sentimientos y nos lleva a contactar con deseos, necesidades y con una parte muy esencial en nosotros mismos. En mi vida personal e muy importante y en mi trabajo lo uso constantemente como herramienta terapéutica. Muchas gracias, Raquel, por explorar este ámbito tan importante y compartir con nosotros tus reflexiones.
Raquel musicóloga! Me gustó mucho, muchas gracias 🙂
Muy interesante la información, ya que nos permite ver la importancia de algo tan cotidiano
como la música.
Genial que te haya gustado Clarita! 🙂